Sorpresa: un domingo sin suicidio.
No sé si hay que salvarse, pero sé que no lo estamos haciendo. No al menos cuando cerramos los ojos y dejamos pasar el cadáver frente a nosotros. Me pasa que salvarse me suena a "conciencia", y "conciencia" me suena a deber, a prólogo, al prólogo de la vida. Somos conscientes de esssto? De esssto; con la repetición necesaria de la letra s. No sé de que se trata esta nota, solo quería plasmar mi vida en las últimas veinticuatro horas, o volver a contar lo que pienso de la vida a través de pensamientos, pero no, no sé. Nos estamos salvando o matándonos en cada palabra? en cada interpretación de las cosas? de los que nos sucede a nosotros? Nuestra salvación no estará ligada a nuestra leyenda personal? Y digo leyenda, "leyenda": porque nadie más la vive que uno, la vivís vos, el otro ni siquiera la mira desde afuera, él otro es un mero lector de tu vida, y si sos buen escritor capáz que tenés éxito. Capáz que la moral se funde mucho en esto, en que hacés, ...